domingo, febrero 28, 2010

Zapatero de los cojones


Zapatero, a tus zapatos. Es un refrán muy utilizado. O lo era. Hacia tiempo que no volvía a escribir en este blog, entre otras cosas por el convencimiento de que opinar, o no opinar, esa es la cuestión, ¿de qué vale? Ahora sé que más que nada, esto de opinar es terapéutico. Sí, estoy hasta los mismísmos de Zapatero, sus ministros, su camarilla mediática, sus sindicatos, los banqueros, que no son suyos, pues son los amos de este rojo rojísimo que dice ser Zapatero, y por eso aquí están estas líneas, para descargar de alguna manera todo este odio infinito que tengo acumulado hacia estos corruptos ineptos e incompetentes que dicen ser socialistas, que dicen ser obreros sin haber trabajado en su puta vida, y aseguran ser españoles, esto último, quizás por imperativo legal o por simple desgana, podría ser verdad, porque gente más tonta, es difícil encontrala. Y si por algo se distingue este país es por ser un país de listos. Pero como el refranero nunca miente: "dime de que presumes, y te diré de que carces".

Etiquetas: